Cuando uno viaja las experiencias se te graban en la piel, las lindas y las feas, todas te dejan una marca y te acompañan para siempre. El gran Joaquín Sabina canta 19 días y 500 noches y pensando en él y en su imprescindible poesía repasamos nuestros 90 días y 90 noches. Itinerario de 3 meses en Asia.
Cumplimos 90 días, un itinerario de 3 días en Asia. La mitad de nuestro viaje y nos dieron ganas de volver a pensar en muchas de las cosas que vivimos hasta ahora, esas cosas que en el vértigo de saltar de ciudad en ciudad siempre uno deja para más adelante. No es nuestro objetivo hacer un balance, por lo menos no por ahora, solo rememorar mucho de lo vivido aunque se nos estruje el corazón al repasar nuestras notas de viaje y volver a ver las miles (si miles, gracias fotografía digital!) de fotos que sacamos. Pero ni bien empezamos ya nos sorprende esa nostalgia tan porteña o esa saudade que tan bien saben explicar los brasileños. Esa especie de tristeza por esos momentos maravillosos o no tanto, pero que ya han pasado y que son irrepetibles, únicos. En eso estamos mientras recordamos a la maravillosa Estambul recostada sobre el Bósforo que nos abrió las puertas al principio de nuestro viaje y que por suerte regresaremos a ella cuando estemos llegando al final.
Las calles de Bangkok siempre vivas en cualquier horario, entre el río Chao Phraya y sus canales, ciudad siempre dispuesta a darte la mejor comida callejera cuando más la necesites.
Las playas de la bonita Koh Tao, en donde en su mar transparente pudimos acceder al buceo más barato del mundo.
Las cenas a la luz de las velas en las playas de Sihanoukville mientras los nenes de la zona se sientan con los turistas para que les presten por un rato sus computadoras. También recordamos con añoranza las playas de arena blanca y mar transparente de la Isla casi desierta de Koh Rong frente a Sihanoukville y la fabulosa comida de mar que disfrutamos allí a precios inimaginables.
Cuando el calor aprieta indispensable tomarse unas cervezas ricas y baratas en banquitos de plástico sobre la calle en el distrito 1 en la vibrante Saigón.
La romántica Hoi An para caminarla despacito y con todos los sentidos despiertos…
Y por supuesto la noche en la bahía de Halong, insuperable y mágico dormirse allí mirando las estrellas entre la bruma.
Poder recorrer los impresionantes templos de Bagán en la lejana Myanmar con sus amaneceres y atardeceres y visitar las maravillosas ruinas de Angkor Wat en Camboya no lo soñamos ni en nuestros sueños más locos pero hasta allí llegamos.
Esos lugares nos trasladaron en un segundo a miles de años atrás, a los tiempos dorados de estos pueblos, reinos orgullosos y ricos: Angkor Wat en Camboya. Tiempos en donde arquitectos, ingenieros, extraordinarios artesanos, orfebres y escultores (también miles de obreros y esclavos) podían llevar adelante las fantasías más disparatadas de poderosos monarcas y emperadores. Mil años después en los mismos lugares, millones de personas viven en la miseria entre la basura, sin cloacas, luz eléctrica, agua corriente, hospitales, ni escuelas y la lista de necesidades se vuelve interminable.
El mundo se nos aparece maravilloso la mayoría de las veces pero también las realidades de algunos países nos golpean fuerte, como si chocáramos contra un tren de frente. Tanta desigualdad, tanto amor por el dinero de unos pocos, mientras al lado suyo se mueren de hambre miles o millones nos produce de todo: bronca, enojo, incertidumbre; ganas de ayudar pero de no saber cómo. Yangón en Myanmar y Phnom Penh en Camboya fueron dos de estos ejemplos.
Como Myanmar y Camboya, Calcuta en India también nos produjo mucho de eso. Tierra de premios Nobel, de rica cultura y también de pobreza eterna. Cuando los diarios nos hablan de una India potencia y vemos los miles de mendigos que se acumulan en sus calles o en las de Siliguri en la frontera norte, no podemos otra cosa que preguntarnos de que estarán hablando estos genios de la economía y las finanzas.
Somos viajeros, pero también somos periodistas y no podemos solo viajar a los lugares “lindos” y olvidarnos de los “feos”. Como tampoco podemos concentrarnos solo en lo que nos gusta, sin mirar para otro lado. Es la profesión que amamos y le debemos nuestro compromiso sin prejuicios y sin intereses creados, solo nuestra opinión, libre por suerte. Cuando el desaliento nos llega y eso es algo común en los viajeros de mucho tiempo, cuando se extraña a la familia, a los amigos, a las calles del barrio, a la amada Buenos Aires, uno siempre puede encontrar una sonrisa, una mano de un desconocido a miles de kilómetros de tu casa y una palabra desinteresada del que nada tiene, pero igual quiere ayudar. Allí volvemos a reencontrarnos con la belleza del ser humano que aún en sus necesidades asiste a otro sin esperar nada a cambio.
Con las fuerzas renovadas y casi al filo de los tres meses de viaje nos fuimos hasta la bella y montañosa Darjeeling, en donde se produce el mejor té del mundo.
Luego de unos días llegamos a la repleta de turistas Katmandú en Nepal que enclavada entre los Himalayas es la mejor puerta de entrada para visitar no solo al famoso Everest sino también las otras montañas que se ubican junto a él.
A unas horas de Kathmandú el Parque Nacional Chitwan nos acercó a la naturaleza y a una experiencia imperdible por la selva y a lomo de elefante en busca de los rinocerontes. El broche de oro es poder pegarse un baño en el río junto a estos grandes paquidermos.
Viajar de verdad, pasarse quince días en un all inclusive sin salir de allí no es precisamente Viajar, permite repensar la vida a todo nivel. Los diferentes valores que cada una de las sociedades posee, sus diferentes religiones, sus distintas miradas del mundo y hasta lo que en la Argentina llamamos el sentido común, que puede no ser tan común en otras partes del mundo. Viajar permite además de conocer lugares increíbles poder conversar con gente de todas partes del globo, reírse con ellos, aceptar las diferencias y hasta sellar amistades para toda una vida. Nos han tocado mesas en donde charlamos con personas de los cinco continentes, todas las religiones, todos los colores, maravillosamente unidos por el amor a dar vueltas por el mundo, sin prejuicios, sin condiciones. También nos ha pasado de disentir con muchos turistas que nos decían que habían disfrutado del No contaminado “sabor local” de un lugar en donde las personas viven a duras penas y en la más absoluta pobreza. Sería interesante saber si todos ellos se animarían a vivir un poco más de un par de días en las tremendas condiciones que vive toda esa gente. No hay que confundir los tantos, una cosa son las tradiciones milenarias de cada pueblo y otra totalmente diferente es comer salteado, vivir en medio de la basura y morir por enfermedades que en la otra mitad del mundo se curan con un par de pastillas que no cuestan ni medio dólar.
Nuestro viaje sigue, se viene Varanasi, una de las ciudades más sagradas de la India que con amor abraza al Ganges, el milenario río mítico en donde todo termina pero también en donde todo se inicia.
Gracias por el apoyo, los mensajes y la compañía. Un abrazo de los Periodistas Viajeros.
3 meses o 90 días
7 países:
Turquía, Tailandia, Camboya, Myanmar, Vietnam, India y Nepal.
29 Ciudades, pueblos, islas, bahías y más:
Estambul, Bangkok, Koh Tao, Ko Phanghan, Ko Samui, Poipet, Siem Reap, Angkor Wat, Phnom Penh, Sihanoukville, Koh Rong Samloem, Yangón, Inle lake, Bagán, Mandalay, Ho Chi Minh, Mui Ne, Nha Trang, Hoi An, Cua Dai, Hue, Hanoi, Halong bay, Kolkata, Darjeeling, Siliguri, Katmandú, Sarahuara, Chitwan.
Cuartos de hotel:
31 (o semejantes)
Medios de transporte:
18 (Avión, Bus, Sleeping Bus, Minibus, Taxi, Tuk Tuk, Rickshaw, Crucero, Barco, Bote, Canoa, Ferry, Kayak, Moto, Bicicleta, Elefante, Carro a caballo, Subte, Skytrain, Tren)
Aviones:
7 (Turkish Airlines, Malasya Airlines, Air Asia, Buddha Air, Air India)
Monedas:
10 (Peso Argentino, Lira Turca, Dólar, Euro, Bath, Riel, Dongs, Kyat, Rupia India, Rupia Nepalí. Lo difícil que es pasar por 10 cambios diferentes!
Pérdidas:
Pañuelo, Anteojos de sol, Pareo, Pasaje de bus a Sihanoukville.
Abandonado en el camino:
Valija, Mochila, Remeras, Sweater, Botas, Buzos, Ojotas, Calzoncillos, bombachas, libros.
Insectos y Animales:
Ratas, lagartijas, moscas, mosquitos, cucarachas, caballos, perros, gatos, monos, vacas, cebúes, búfalos, gallinas, gallos, patos, cabras, chanchos, elefantes, rinocerontes, ciervos, cerdo salvaje, pavos reales, peces, langostas, cangrejos, erizos de mar, boas.
WOW!!! Menudo viaje, es impresionante!!! y cada vez que habláis de India me viene a la cabeza mi último viaje a aquellas tierras.
Muy buena entrada y muy documentada.
Seguid disfrutando
Gracias Arol! Contanos de tu experiencia viajera en India!
Qué lindo viaje amigos! Sigan disfrutando y avisen cuando vuelvan así nos juntamos! Besos
Gracias Ceci!!! Para principios de Julio estamos por allá de nuevo! Saludos a la flia!
90 dias ya!! Que bueno!! Cuantas cosas vividas! Vaya lugares visitados!! Que gran experiencia!!
Que continue el viaje. Un fuerte abrazo!!
Muchas Gracias Octavio! La verdad una experiencia que nos quedará en el corazón y en la memoria para siempre. Saludos!
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