La página está en blanco y de fondo en la televisión suena un tema de Laura Pausini, que al principio dice “La amistad es algo que atraviesa el alma. Es un sentimiento que no se te va…” Nunca le habíamos prestado atención a la letra de esta canción, nunca hasta hoy. Y nos parece un excelente inicio ahora que queremos agradecer a tantos amigos que nos dieron una mano fundamental en estos seis meses de dar vueltas por el mundo. Al regresar de nuestros viajes lo primero que sentimos es alegría por volver a nuestro país, a nuestra ciudad, con la gente que queremos y las calles que extrañamos a la distancia. Pero también la nostalgia nos agarra y no nos suelta, nos zamarrea, nos hace añorar lo vivido, sentimos como si nos faltara algo. Es profunda la melancolía por las aventuras corridas, los lugares visitados, los momentos pasados muchos increíbles, inolvidables y otros de zozobra, también inolvidables, pero en donde la sonrisa solo surge cuando ya estamos en casita y a salvo. En este caso queremos evocar con una sonrisa en el alma y un nos volveremos a ver en el corazón a todos los amigos que de la forma más desinteresada y amena nos abrieron las puertas de sus casas, nos acompañaron, aconsejaron, fueron nuestros guías, nos invitaron a comer, nos mimaron, nos hicieron reír con sus historias y nos mostraron lugares que nunca hubiésemos conocido si no hubiera sido por ellos. Son muchas las anécdotas, la mayoría imperdibles, indelebles, aquí van solo algunas.
Londres-Inglaterra
Son las cinco y media de la tarde y Miguel nos dice ¿Qué les parece si nos vamos para Greenwich? No lo teníamos en carpeta, pero decimos sí, sin dudar. Nos tomamos el tren y 40 minutos después nos bajamos en los parques reales de Greenwich, lugar en donde los expertos desde hace casi ciento treinta años hacen pasar la línea del famoso Meridiano que divide al mundo y une los polos. Caminamos entre hermosas flores, lagos y ardillas, la gente pasea tranquila y hace gimnasia, nosotros andamos por allí respirando el aroma fresco y levemente mojado del pasto, hasta que llegamos al observatorio astronómico, el punto mas importante e histórico del lugar. Frente a él se abre un muy lindo barranco de césped que da a un palacio llamado Casa de la Reina y luego a los antiguos edificios de la armada, atrás el Támesis discurre lentamente. Allí nos sentamos a ver caer la tarde en tonos rojizos y anaranjados y por esas cosas increíbles de la tecnología conseguimos charlar desde el celular con Ina la esposa de Miguel y Ema su pequeña hija que están a miles de kilómetros, en Rumania.
Amberes-Bélgica
El sábado nos vamos todos juntos a pasear por Amberes, nos dicen el día anterior Natalia y su novio Josh, aceptamos gustosos y cerca del mediodía tomamos la carretera salpicada de casitas y campos sembrados y una hora después llegamos a destino. Andamos por el centro en donde se alinea una larga fila de niños sentados en colchonetas de colores rojo y azul y toda la ciudad parece bastante revolucionada con esto. Nos cuentan que están allí para conseguir el record Guinness de vueltas carnero, aunque no lo crean. Seguimos paseando y charlando, pasamos por la plaza Mayor en donde se encuentra la estatua del héroe local que sostiene la mano que le cortó al malvado gigante que habitaba esta zona, según cuentan las leyendas. Justamente esta historia le dio el nombre a la ciudad: Amberes, es Antwerpen en flamenco, Ant significa mano y Werpen, Lanzar. A la noche después de todo un día de paseo y de vuelta en Lovaina cenamos tallarines con carne a la argentina entre charlas, historias y brindis varios.
Amsterdam-Holanda
Llegamos a Amsterdam una mañana neblinosa que anuncia tormenta. Los primeros diez minutos los pasamos tocando timbre dos casas mas allá de la que teníamos que hacerlo, ¡andábamos medio despistados parece! Cuando finalmente la encontramos nos espera Killo junto a su novia holandesa con el tiempo justo para darnos una taza de café, actualizarnos de nuestras vidas, unas pocas explicaciones y las llaves de su casa y de los candados de las bicicletas que descansan frente a la puerta. Ellos están saliendo de viaje en un par de minutos. Nos parece maravillosa la confianza que depositan en nosotros y maravillosa Amsterdam con sus canales, sus casas flotantes, sus bicicletas, sus historias y su manera tan libre de mirar la vida.
Barcelona-España
Llegamos tarde y hambrientos a Barcelona, pero Vicky nos espera despierta y con entusiasmo a pesar de la hora y de su larga jornada laboral. Son más de las doce pero en Barcelona hay juerga hasta la madrugada, amamos las ciudades en donde se puede cenar hasta tarde. Damos una vuelta por el barrio de Gracia y entramos en un restaurante de tapas. Nos dejamos guiar por Vicky que conoce bien el menú y disfrutamos de croquetas de jamón ibérico, pequeños canelones de hongos, papas fritas con huevo frito y morcilla, tiritas de cerdo con salsa de berenjenas, todo exquisito, mas vino tinto y las historias de nuestra amiga que nos arrancan una carcajada tras otra.
Al día siguiente nos encontramos con Migus, una de las grandes amigas de Caro y que hace años vive en Barcelona. La esperamos frente a la plaza Catalunya mientras vemos a la gente que pasea por allí y las palomas que se arremolinan en el centro. Tomamos por la Rambla, la avenida principal que tiene un boulevard en medio en donde se ubican negocios y restaurantes, más allá aparece el mercado de la Boquería, almorzamos en uno de sus puestos entre el bullicio y el aroma de las tortillas y las gambas al ajillo. Esa tarde y los días siguientes con Migus, guía exigente y comprometida, conoceremos el barrio Gótico, el Born, el Raval, la hermosa iglesia Santa María del Mar y andaremos bajo la lluvia por la Barceloneta y sus playas y hasta disfrutamos de los festejos del Barcelona Campeón. Hablando un poco de todo, de la vida, de los sueños, del futuro, de los viajes, de los proyectos, de la amistad.
Tarragona-España
Ese viernes quedamos con nuestra amiga Juliana, que también nos aloja en su departamento, para reunirnos en la plaza central en donde se disponen varios bares y los televisores pasan la final de la Copa del rey entre el Real y el Atlético de Madrid. Está lloviznando y nos acomodamos afuera debajo de amplias sombrillas blancas, somos seis, cuatro chicas y dos chicos. Entre copas y anécdotas no paramos de reír. Una memorable es la de Víctor que estuvo viviendo un mes en un templo chino de kung fu en busca de su yo interior y en cambio como en las películas norteamericanas, lo hacían entrenar todo el día ni bien despuntaba el alba, dormir muy poco, comer tan solo un cuenco de arroz y con unas reglas tan rígidas que el ejército parecería un juego de niños. También la obsesión de Lilian por los cubos mágicos y su confesión de que no puede salir de su casa si no lleva uno en la cartera nos hicieron reír mucho. O cuando Juliana junto a dos amigas viajaron a Madrid para pasar unos días, pero no visitaron el museo del Prado, la Puerta del Sol, la fuente de Cibeles, la plaza Mayor o cualquier otro de sus lugares emblemáticos. Las chicas se fueron directo a la Casa Museo del Ratón Pérez.
Madrid-España
Dejamos a Leo el gato de un mes que tiene fascinada a Bea y caminamos unas cuadras hasta Lavapies en donde aparecen unas callecitas con restaurantes con mesas en la calle y vendedores de latas de cerveza. Nos sentamos a comer en uno que está repleto de gente y en donde los mozos pasan por delante nuestro con apetitosos guisos en cacerolas de barro. En las paredes tienen consignas contra el facismo y hasta un pañuelo de Abuelas de Plaza de Mayo, firmado por Estela de Carlotto. Conversamos de todo mientras comemos papas bravas y tomamos un tintillo riojano. Al día siguiente es el cumpleaños de Bea y allí entre amigos, historias, risas y el gato que pasa de mano en mano pasamos una noche muy linda y divertida.
Segovia-España
Viajamos a Segovia por el día y nos encontramos con Bea que nos pasa a buscar con su auto y su pequeño hijo Juan. No tiene mucho tiempo pero no quería perder la oportunidad de reencontrarse con Caro. En su auto damos una vuelta por las afueras de la ciudad en donde aparecen unas vistas espectaculares del Alcázar, de la antigua iglesia templaria y del impresionante acueducto romano. Antes de regresar a su trabajo nos invita a tomar una copa en un bar justo enfrente del restaurante donde nos reservó una mesa. Tras el almuerzo de muy rica comida segoviana, nos disponemos a pagar la cuenta. El mozo con una sonrisa nos dice que Bea ya había dejado todo pago.
Granada-España
Es nuestro primer día y Enrique nos lleva a dar vueltas por la ciudad con la Sierra Nevada de fondo y la Alhambra que se recorta en el paisaje, vamos hasta el río y luego encaramos el barrio antiguo llamado Albayzin en donde subiendo por bonitas escaleras de piedra entre casonas con flores violetas nos vamos acercando al mirador de San Nicolás. Nos sentamos a descansar y a ver la Alhambra, con el palacio de Carlos V en medio y los jardines del Generalife a su izquierda, mas allá las montañas de picos nevados y los acantilados llenos de vegetación. Luego de un rato bajamos hasta el paseo de la Tristeza, justo debajo de la Alhambra, en donde se ubican restaurantes en un boulevard. Tomamos allí unas cuantas cañas, mientras Enrique le repite al mozo que no olvide las tapillas que acompañarán a nuestras cervezas! Serán varias las comidas y las historias con Enrique, como la noche siguiente en la feria de Granada, entre montañas rusas, autitos chocadores, música andaluza y comida de la buena.
Desde nuestros asientos del bus podemos ver a Enrique que nos levanta la mano, nos llevó hasta la estación y se quedó con nosotros hasta que partimos. Lo saludamos una vez más, mientras sonreímos recordando como todas las mañanas nos despertaba diciendo es un buen momento para tomarnos una cervecilla!
Sevilla-España
Es nuestra ultima noche en la ciudad y caminamos tan solo unos metros hasta un pequeño almacén repleto de jamones ibéricos, quesos, fiambres y otras delicatessen. Enrique y Sandra quienes nos alojaron unos días en uno de sus departamentos, nos llevan a esa joya escondida. El lugar es chico y está lleno. Empezamos comiendo parados en un rincón, es muy común en toda Andalucía y luego conseguimos mesa. Disfrutamos de todo tipo de exquisiteces, jamón ibérico de cerdos alimentados con bellota, queso manchego, lomo embuchado, salamines que quitan el aliento y más. Charlamos mucho, Enrique acaba de retirarse como árbitro profesional y tiene montones de anécdotas con los grandes del futbol como Messi, Cristiano Ronaldo y Mourinho. Sandra es guía de turismo y esa tarde se hizo tiempo para llevarnos a recorrer el Alcázar con sus historias, sus palacios y jardines. A la hora de la cuenta los chicos no nos dejan pagar nada.
Cádiz-España
En Cádiz, mas bien cruzando el mar, en Santa María nos volvemos a encontrar con nuestra amiga catalana Victoria. Ella vive parte de la semana allí, con su novio Salvador y su perrito Momo. Esa noche vamos a cenar a una típica y pequeña tasca andaluza en donde se come en la barra a muy buen precio. Probamos delicias de mar que nunca habíamos tenido oportunidad, como huevas, cazón y acedias. Luego vamos a tomar unas copas a un bar que da a la playa, que a esa hora está ventosa y oscura, con pequeñas luces que titilan en el horizonte. Entre gin tonic, vino y tequila la seguimos hasta la madrugada.
París-Francia
Llegamos al aeropuerto de Orly a eso de las once y Panos nuestro amigo griego que vive hace años en París nos viene a recibir. Es un gran esfuerzo suyo ya que es tarde y no tiene auto. Con media París en obras tardaremos un buen rato en llegar a su departamento ubicado cerca de la Place d´ Italie, en donde de madrugada improvisaremos unos fideos con tuco. En los días siguientes charlaremos de todo, pasearemos por la calles de la ciudad con el Sena serpenteando, escucharemos música argentina, iremos a cenar con sus amigos griegos y hasta festejaremos su cumpleaños jugando al metegol en un bar! En los días que estuvimos en París, Panos no solo tiene sus largas jornadas de trabajo sino también un importante examen para su carrera de médico que lo tiene estudiando mucho, igualmente siempre se hará tiempo para conversar con nosotros y ayudarnos en lo que necesitemos.
Belgrado-Serbia
Llegamos a la tarde luego de unas cuantas horas de viaje en bus desde Budapest. Jasenka con su pequeño hijo Buki se da un largo abrazo con Caro y Valentín su esposo nos ofrece raki la potente bebida nacional para recomponernos del viaje. A las seis y media la cena está servida, una apetitosa olla con pimientos rellenos de carne y arroz, en salsa de paprika. Allí Valentín nos hace tomar vasos y vasos de vino tinto de Montenegro, de las viñas de su padre. Detrás nuestro el televisor transmite el partido de Djockovic jugando en el pasto de Wimbledon. A la noche salimos con el auto, pasamos por el edificio de la Asamblea nacional todo iluminado y cruzamos el puente hacia la parte nueva de Belgrado, con altos edificios de oficinas, hasta llegar a la zona en donde se ubican lindos restaurantes y bares flotantes a la vera del rio. Allí con música de fondo y cervezas en mano charlamos de todo.
Un abrazo de corazón para todos con los que compartimos casas, comidas, paseos, cafés, cervezas, vinos, anécdotas y risas. Los extrañamos a la distancia. Nos hicieron pasar momentos inolvidables. Esperamos volver a encontrarnos en el lugar del mundo que sea y por supuesto los invitamos a Buenos Aires para seguir charlando, salir de copas, comer un buen asado y más mucho más.

Javi, Leandro, Angelina, Jon, Bernardo, Carla, Tito y Alex (Madrid) Vicky, Erwin, Javi (Barcelona) Paola y Cynthia (Amsterdam) Cata (Madrid) Bea, Jesús, María y Valle (Madrid)

Amigos son los amigos. Phung y Phuong (Vietnam), Shyam (India), Josemari (Turquía) e Miguel, Sebas y Nati (Inglaterra)
He leido amigos por el mundo | PERIODISTAS VIAJEROS con mucho interes y me ha parecido interesente ademas de facil de leer. No dejeis de cuidar esta web es buena.
Hola Via Verde, muchas gracias por el aliento. Esperamos no defraudarlos. ¡La energía está! Saludos!